jueves, 5 de mayo de 2011

"EXPERIMENTANDO LA GLORIA DE DIOS "

EXPERIMENTANDO LA GLORIA DE DIOS
2 Crónicas 5
“Cuando sonaban, pues, las trompetas, y cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a Jehová: y a medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de música, y alababan a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre: entonces la casa se llenó de una nube, la casa de Jehová.”

Realicemos un viaje en el tiempo y ubiquémonos en el día de inauguración del templo. Estamos al fondo del lugar santo, justo en frente de la cortina del lugar santísimo. Al atravesar el gran velo, inmediatamente llegamos a esta gran cámara de 9x9x9 metros de ancho, largo y alto. Resulta impresionante ver los muros cubiertos de oro finísimo con figuras de querubines en relieve del mismo material; el plafón también está cubierto de oro. Me he quedado pasmado en la entrada del lugar santísimo ¡Estoy parado sobre piso de oro! Frente a nosotros, como dándonos la bienvenida, están dos gigantescas figuras de querubines, que solo pueden apreciarse desde lejos; miden cerca de 5 m de alto, están parados en medio, uno a la derecha de otro, con las alas extendidas abarcan todo lo ancho del santuario.
La cámara no estará vacía por mas tiempo, pues un grupo de sacerdotes levitas vestidos con sus mejores atavíos van entrando justamente aquí, al lugar santísimo, con mucha solemnidad depositan el cofre del pacto en medio de las dos figuras de querubines, justo donde sus alas se encuentran. Algunos sacerdotes están ofreciendo incienso y panes sobre las 10 mesas que están en el lugar santo. Otros más han estado trabajando desde la mañana en el gigantesco altar exterior. Los 288 músicos principales se han reunido para tocar y cantar alabanzas en el atrio, es impresionante como se oye la música desde aquí, me parece que los otros 4000 músicos y cantores ayudantes también están ejecutando, porque desde dentro del templo puede escucharse algo sumamente maravilloso; y no podría ser menos, pues para esta gran ocasión se han reunido los tres príncipes de la alabanza: Asaf, Hermán y Jedutún. ¿Los puedes escuchar? “Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre”.
Después de depositar el arca en el lugar santísimo y de la ministración sacerdotal, los que estaban dentro comienzan a salir. Justo en este momento sucede algo asombroso: al tiempo en que las alabanzas van llegando a su clímax en un portentoso crescendo, poco a poco, todo el templo se va llenando de una nube, se siente algo sumamente poderoso que no nos permite estar más dentro del santuario, ¡Estamos experimentando la gloria de Jehová, el Señor ha venido a tomar posesión de su casa y ha manifestado su gloriosa presencia de una forma sencilla para que podamos comprender, por medio de una nube!
Reflexionemos:
• La gloria de Jehová se manifestó con plenitud, no al ofrecer sacrificios de animales, sino a la hora alabar.
• El Señor entró y tomó posesión de su casa, solo cuando los sacerdotes salieron. Debemos salir y dejarle el control absoluto, solo así manifestará su gloriosa presencia.


TRANSFORMADOS PARA SERVIR
JOSIAS I.G.

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